
Xylella o ébola del olivo
Xylella fastidiosa
Patógeno:
Bacteria
Tipo:
Riesgo:
CRÍTICO





DESCRIPCIÓN
Descripción del patógeno
Xylella fastidiosa es una bacteria fitopatógena que afecta a una variedad de plantas, incluido el olivo. Esta bacteria se propaga principalmente a través de insectos vectores como los cicadélidos, que se alimentan de la savia de las plantas y pueden transmitir la bacteria de una planta a otra. Una vez en la planta, Xylella fastidiosa coloniza el sistema vascular, obstruyendo los vasos conductores de agua y nutrientes. Esto lleva a la aparición de síntomas de estrés hídrico y, en última instancia, puede causar la muerte de la planta.
Descripción de la enfermedad
La enfermedad conocida como Xylella o ébola del olivo es causada por la infección de Xylella fastidiosa en los olivos. Los síntomas de la enfermedad incluyen el marchitamiento y muerte regresiva de las ramas, necrosis foliar, caída prematura de las hojas y reducción en la producción de aceitunas. A medida que la enfermedad avanza, puede causar la muerte total del árbol.
• Marchitamiento y muerte regresiva de las ramas.
• Necrosis foliar, especialmente en los bordes de las hojas.
• Caída prematura de las hojas.
• Reducción en la producción de aceitunas.
• Muerte total del árbol en casos graves.

TEMPERATURA Y HUMEDAD
20°C - 30°C
40% - 80%

VÍAS DE TRANSMISIÓN
Vectores insectos, herramientas contaminadas, movimiento de plantas infectadas.

Tratamientos químicos
CONTROL
No existen tratamientos eficaces contra esta plaga. Se recomienda eliminar las plantas infectadas y las plantas próximas para evitar propagación. Así como poner medidas para controlar los insectos vectores.
Tratamientos autorizados en agricultura ecológica
No existen tratamientos eficaces contra esta plaga. Se recomienda eliminar las plantas infectadas y las plantas próximas para evitar propagación. Así como poner medidas para controlar los insectos vectores.
Control biológico
-
Tratamientos preventivos
No existen tratamientos eficaces contra esta plaga. Se recomienda eliminar las plantas infectadas y las plantas próximas para evitar propagación. Así como poner medidas para controlar los insectos vectores.
• Monitorear regularmente las plantas para detectar signos tempranos de infección.
• Eliminar y destruir las plantas infectadas para evitar la propagación.
• Controlar los insectos vectores, principalmente los cicadélidos y cercópidos, mediante insecticidas específicos o trampas.
• Promover la biodiversidad en el entorno para favorecer la presencia de enemigos naturales de los vectores.
• Evitar el movimiento de plantas de áreas infectadas a áreas libres de la enfermedad.
• Practicar medidas de bioseguridad, como desinfectar las herramientas de poda y mantener la higiene en el campo.
• Empleo de variedades resistentes o de baja susceptibilidad.
Recomendaciones
*Los tratamientos recomendados no dejan de ser recomendaciones según las bases de datos de las autoridades y en ningún momento sustituyen las directrices marcadas según la legislación de cada país