La mosca blanca, perteneciente a la familia Aleyrodidae, es una plaga común que afecta a una amplia variedad de plantas, incluyendo el geranio. Estos pequeños insectos, de apenas unos milímetros de longitud, se caracterizan por sus alas blancas y su apariencia similar a la de una pequeña mosca. La mosca blanca se alimenta de la savia de las plantas y produce una sustancia pegajosa conocida como mielada, que puede favorecer el crecimiento de hongos como el moho negro. Además, estas plagas pueden transmitir virus y enfermedades a las plantas, lo que agrava los daños causados por su alimentación.